Desde 1977, el 18 de mayo se celebra el Día Internacional de los Museos (#DIM2023, #IMD2023). Este 2023, el Consejo Internacional de Museos (ICOM) se ha decantado por el tema “Museos, sostenibilidad y bienestar (#MuseosSostenibilidadBienestar). La temática está en consonancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y en esa línea incluye acciones que van desde la cuestión climática hasta la inclusión social.
Y para celebrar este 18 de Mayo, os ofrecemos una entrevista con el historiador Tobias Vilhena, sobre el Museu Lasar Segall.
El entrevistado
Tobias Vilhena de Moraes es historiador y arqueólogo. Desde 2007, trabaja en el área de la Cultura, en los campos del Patrimonio Cultural y la memoria, desarrollando su labor principalmente dentro de instituciones y organismos culturales (IPHAN e Ibram), responsables de la preservación del Patrimonio cultural brasileño. En 2017 empieza trabajar en el Museu Lasar Segall, en São Paulo. Fue becario en el National Park Service (New Bedford, Estados Unidos). Durante el doctorado, trabajó como investigador en la Universidade de Coimbra, así como en el campo arqueológico de Mértola, en el Alentejo portugués. Posteriormente, hizo un posdoctorado en la Universidade Estadual de Campinas (Unicamp, Brasil) con una beca de la FAPESP, bajo la supervisión del Prof. Dr. Pedro Paulo Funari. Trabaja también como investigador colaborador del IFCH/Unicamp. En el Museu, el investigador trabaja con los fondos mantenidos por la Biblioteca Jenny Klabin Segall y con las traducciones y estudio paleográfico de los documentos de Segall escritos en ruso.
Lasar Segall, el artista
Lasar Segall (Vilna, 1889 – São Paulo, 1957) es un referente importante del Modernismo brasileño. Mônica Raisa Schpun, en su artículo “Lasar Segall entre viagens e migrações: um europeu nos trópicos”, realiza un interesante recorrido por la vida del artista, por sus idas y venidas entre Brasil y Europa, y explica cómo esa migración marcó su obra. Para ella, el de Lasar Segall es
un caso paradigmático para el estudio de las migraciones de artistas tanto por las marcas dejadas por la experiencia migratoria en su pintura, como por el destaque que se les da en la recepción crítica de su obra
Schpun, 2018, pp. 231-232.
En 1906, con 17 años, Lasar Segall emigró a Alemania para continuar con su formación artística. En ese país, estudió en la Escuela de Artes Aplicadas, de Berlín y, después, en la Academia de Bellas Artes. En 1910, se mudó a Dresden.
Fue en 1912 cuando, a invitación de su hermana Luca – que ya vivía en São Paulo -, viajó por primera vez a Brasil. En aquella época, la ciudad de São Paulo aún no ofrecía un mercado de Arte, pero a pesar de ello Lasar Segall consiguió desenvolverse en la ciudad, participando en algunas actividades artísticas. La familia del artista, establecida en São Paulo – ciudad que ya contaba con una comunidad judía – , formaba parte de cierta elite local.
Intelectualizados y sensibles al mundo de las artes, los miembros de ese pequeño núcleo se inserían en redes sociales no exclusivamente judías, hecho digno de mención
Schpun, 2018, p. 233.
De cualquier forma, esa primera estancia solo duró ocho meses y Segall regresó a Dresden, en Alemania.
Al regresar al Viejo Mundo, la situación de Lasar Segall, que ya disfrutaba de cierto reconocimiento en Alemania, se volvió difícil. Había estallado la Primera Guerra Mundial. En ese momento, el artista contó con la ayuda de un profesor, amigo suyo, para poder permanecer en Dresden: recordemos que Alemania y la Rusia zarista eran naciones enemigas en esa época.
En el contexto de la guerra, los artistas judíos rusos, como Segall y sus amigos, era pro alemanes. Apesar de haber sido tratados con desconfianza, y confinados, no representaban ninguna amenaza política para su país de acogida. De hecho, el Imperio Ruso era, en esa época, escenario de violentas persecuciones antisemitas, lo que acababa con cualquier posibilidad de identificación de esos inmigrantes con su país natal.
Schpun, 2018, p. 234.
Acabada la Guerra, el nacionalismo había invadido las Artes y la crisis económica devoraba todo a su paso. Por ese motivo, y a pesar de la buena reputación que tenía en Alemania, Lasar Segall decide, en 1923, volver a São Paulo, una ciudad que adquiría nuevos aires “modernistas”. Sobre ese contexto, Schup afirma que “llegando aquí como un artista completo, pronto ocupó una posición destacada y de liderazgo en el medio que lo recibía” (Schpun, 2018, p. 240).
En 1924, se casó con Jenny Klabin, cuñada de su hermana Luba. En Brasil, Lasar Segall se incorporó a la elite artística y cultural del país, vinculándose a sus “debates y envites” (Schpun, 2018, p. 232). Se unió a grandes nombres del Modernismo como Tarsila do Amaral, Oswald de Andrade y Mário de Andrade, figura fundamental para la integración del artista en São Paulo. Lasar Segall, “en 1932, fue cofundador de la Sociedade Pró-Arte Moderna (SPAM), cuya dirección asumió, organizando con energía exposiciones, bailes y eventos” (Schpun, 2018, p. 253). Sobre este tema, también vale la pena consultar el artículo de Fernando Antonio Pinheiro Filho, “Lasar Segall e as festas da SPAM”, que trata del personaje desde una perspectiva más social, desde su labor como productor cultural.
No obstante, como afirma Schpun (2018), no todo eran flores: entre las décadas de 1930 y 1940, también encontramos en Brasil críticos con la obra de “un extranjero” y abiertas manifestaciones de antisemitismo (sobre la crítica a la obra de Lasar Segall y al Modernismo, recomendamos consultar la disertación de Daniel Rincon Caires, defendida en la Universidade de São Paulo (USP, Brasil). El trabajo analiza el discurso de rechazo al arte Modernista en Brasil y en Europa, especialmente en Alemania, con el movimiento “acción contra el arte degenerado”, Entartete Kunst). De cualquier forma, el valor del personaje y de su obra son indiscutibles tanto para el Modernismo como para el Arte brasileño.
La inmigración, la intolerancia, la enfermedad, la lucha de los trabajadores, la prostitución y la guerra son temas siempre presentes en las obras de Segall. En este sentido, si bien la diversidad temática de Segall ofrece la posibilidad de un profundo debate sobre su época, también permite establecer paralelismos con los desafíos de nuestra sociedad contemporánea.
El Museu Lasar Segall
El Museu Lasar Segall está ubicado en el barrio de Vila Mariana, en la ciudad de São Paulo, y fue inaugurado el 21 de septiembre de 1967. En 2009, los museos brasileños que estaban bajo la administración del Departamento de Museus (DEMU) del Instituto do Patrimônio Histórico e Artístico Nacional (Iphan) pasaron a ser gestionados por el Instituto Brasileiro de Museus (Ibram), creado ese mismo año. Según Tobias Vilhena,
El Museu tiene la finalidad de reunir, documentar, conservar, estudiar, exponer y divulgar la obra del artista Lasar Segall, así como realizar otras actividades culturales y artísticas pertinentes. El Museu es una institución de naturaleza museológica, que preserva la memoria y el patrimonio cultural ligados al artista y a su familia directa.
Tobias Vilhena
Sobre los fondos que alberga, Tobias Vilhena nos cuenta que, además de las obras del artista, el Museu Lasar Segall dispone de la Biblioteca Jenny Klabin Segall, que reúne obras y documentación diversa sobre las Artes del espetáculo: teatro, televisión, circo, cine, baile, ópera y fotografía, y buena parte de estos fondos están disponibles en la página web de la institución.
Actualmente, se reúnen en ese espacio 530 mil piezas entre libros, revistas, folletos, CD-ROM, tesis, artículos de prensa, catálogos, programas de espectáculo, fotos, notas de prensa, un basto fondo relacionado con las artes del espectáculo, lo que hizo que esta biblioteca se consolidase como un referente en la materia. (...) Posteriormente, conseguimos consolidar un proyecto titulado "Implantación de Módulos sobre el Teatro brasileño de comedia" en la web de la Biblioteca Digital de las Artes del Espectáculo, lo que nos permitió digitalizarlo aquí y que hoy todo este fondo esté disponible para consulta online. (...) Así, la Biblioteca Jennny Klabin Segall se ha consolidado como el mayor centro de referencia para las Artes del Espectáculo en América Latina, mereciendo ser consultada, mereciendo ser investigada.
Tobias Vilhena
Actualmente, el Museu cuenta con dos exposiciones abiertas al público: “Lasar Segall entre temas y técnicas”, que repasa los temas y técnicas utilizados por el artista; y la exposición “Marina Caram, expresiones de la humanidad”, de una artista cuya obra se inspira en Lasar Segall. Además de las exposiciones, visitas educativas y de la Biblioteca, el museu también ofrece el “Cine Segall”, una sala de cine con entradas a precios módicos. Pero si eres (o pretendes ser) un profesional de las Artes plásticas, el Museu Lasar Segall también oferta un atelier-residencia, un espacio para que artistas invitados puedan “elaborar grabados inspirados en los fondos del Museu Lasar Segall”, además de varios cursos abiertos al público como “Iniciación al grabado de metal”, “Iniciación a la xilografía” o “Iniciación a la litografía”. Todas estas actividades cuentan siempre con la supervisión del artista especialista del museu, Paulo Penna, y utilizan “las herramientas y la maquinaria propias del artista Lasar Segall, que aún están en uso” (Tobias Vilhena).
El Museu Lasar Segall abre todos los días (excepto los martes) de 11 a 19 horas. Conoce un poco más sobre el Museu Lasar Segall en la galería disponible en Google Arts.
Referencias:
Caires, D. R. (2019). Lasar Segal e a perseguição ao Modernismo: Arte Degenerado na Alemanha e no Brasil. Disertación de máster, Universidade de São Paulo, São Paulo, SP, Brasil.
Pinheiro Filho, F. A.. (2004). Lasar Segall e as festas da SPAM. Tempo Social, 16(1), 209–230.
Schpun, M. R. (2018). Lasar Segall entre viagens e migrações: um europeu nos trópicos. Sociologias, 20(49), 230–256.