Ruth Almeida es profesora de la Universidade Federal Rural da Amazonia (UFRA), donde imparte clase de sociología rural, extensión rural y relaciones étnico raciales. Doctora en Ciencias Agrarias, coordina el Grupo de Investigación de Relaciones de Género y Ruralidades Amazónicas del CNPq y es consejera de la Asamblea del Instituto Peabiru (Belem, Pará, Brasil). Este estupendo currículum la convirtió, el pasado 10 de noviembre, en la primera entrevistada del ciclo de charlas virtuales “Voces amazónicas”, un proyecto con el que el CEB y el Instituto Peabiru pretenden dar protagonismo a los diferentes grupos sociales y a las principales agendas contemporáneas de la Amazonia brasileña.
La profesora Almeida y João Meirelles, escritor, activista socioambiental desde hace más de 37 años y CEO del Instituto Peabiru, charlaron durante casi una hora sobre distintos aspectos de la bioeconomía, desde el punto de vista de las comunidades tradicionales. Si te lo perdiste, el vídeo ya está disponible en nuestro canal de Youtube.

Al terminar, la profesora Ruth Almeida nos concedió unos minutos y decidimos aprovechar la oportunidad para acercar a todos los oyentes de Radio Universidad estos conceptos que, aunque pueden sonar extraños, en realidad describen realidades muy cercanas a nosotros y cada vez más relevantes.
Nuestra primera pregunta, claro, no podía ser otra que qué es la bioeconomía desde una perspectiva amazónica. Ella nos cuenta que se trata de una forma de producción de recursos biológicos renovables y su conversión en productos con valor añadido. Un ejemplo de andar por casa es el pastoreo, que permite el desarrollo de una actividad productiva (el de carne, lana o leche) a la vez que limpia los montes y previene los incendios forestales. No se trata de adaptar esos recursos al mercado, sino más bien al contrario: que la economía se adecue a la realidad de la producción de esos recursos. En el caso de la bioeconomía en el marco de las comunidades tradicionales, y especialmente en el caso de la Amazonia, es además muy importante tener en cuenta el contexto. Y es que hablar de Amazonia es hablar de colonización, de grandes espacios que se consideran “vacíos”, de explotación…
La idea no es solo producir productos sostenibles, sino integrar esa producción en ciertos estilos o formas de vida, a veces milenarios, que garanticen no ya la mera supervivencia, sino el desarrollo y el progreso, de esas comunidades. Y es que, en muchos casos, los recursos naturales en la Amazonia no son solo elementos de intercambio, sino que también tienen un uso simbólico, cultural, medicinal, etc. Así, el reto consiste en cómo incorporar todo este conocimiento, todos estos matices, a una economía de carácter mundial. De esta manera, las comunidades tradicionales dejarán de ser unas simples suministradoras de recursos, para convertirse en protagonistas reales de unas cadenas de producción que abarcan a muchos actores.
La sociobioeconomía amazónica: casos concretos
Una vez que nos quedó claro el concepto general (¡ahora sois todos expertos en bioeconomía amazónica!), quisimos que nos pusiera un ejemplo concreto y no se nos ocurrió nada mejor que la producción del açaí. Para el que no lo sepa, el açaí es una pequeña baya de color ciruela muy rica en nutrientes y antioxidantes y que se puede tomar en mil y una elaboraciones. Nace en la palmera Euterpe oleracea que puede llegar a los 20 metros de altura, por lo que la recolección de sus frutos- que se hace a mano-, se convierte en una tarea complicada y peligrosa. Además de su valor alimenticio, en el Amazonas se usa el aceite de açai para tratar la diarrea, la infusión de sus raíces como un remedio para la ictericia y la infusión de las bayas para cicatrizar heridas y úlceras de la piel.
Pues bien, la producción de açai ha sido siempre característica de las comunidades tradicionales amazónicas y desde hace un tiempo, su comercialización se ha generalizado, no solo en Brasil, sino por otras partes del mundo.
Nuestra entrevistada afirma que la producción de esta fruta es un buen ejemplo de cadena de producción organizada: en una punta están los productores, en medio un producto alimenticio muy importante para la población amazónica, pero ya introducido en el mercado nacional, con una importante participación de mujeres y muchos actores implicados, como el estado brasileño, el estado de Pará e instituciones de investigación como distintas universidades o la Embrapa, la Empresa Brasiliera de Pesquisa Agropecuaria. Por todo ello el açai se puede considerar un producto exitoso de sociobioeconomía.
En cualquier caso, hay que tener en cuenta que no se puede hablar de la Amazonia como un todo, y que este éxito que nos comenta se refiere exclusivamente al estado de Pará. Lo mismo ocurre con el siguiente ejemplo que nos pone la profesora Almeida: el caso de la pesca artesanal.
Son muchas las poblaciones tradicionales, como los ribeirinhos, las que viven de esta forma de pesca, mucho más sostenible y respetuosa con el entorno que la habitual pesca extractiva a la que estamos acostumbrados. Es una forma de pesca que implica un modo concreto de vida, y cuya entrada en un mercado que no sea de tipo predatorio debe tener en cuenta la implicación de muchos actores sociales. La profesora Ruth Almeida vuelve a reivindicar la importancia de la mujer amazónica, cuya importante labor en el proceso es a menudo invisible y olvidada.
Para terminar, damos las gracias a la profesora Ruth Almeida por su disponibilidad y su simpatía, y por acércanos de esta manera tan amena y sencilla un concepto complejo como es el de bioeconomía o sociobioeconomía, que es incuso más acertado. Recordaros que el vídeo de su paso por Voces Amazónicas está disponible en el canal de Youtube de BMQS, por si aún os habéis quedado con ganas de más.