En esta emisión de BMQS hablamos con los responsables de “Amazônia Revelada”, una iniciativa que pretende combinar la investigación arqueológica de última generación con el conocimiento tradicional de los pueblos de la selva. Se trata de un proyecto de investigación arqueológica cuyo objetivo es añadir una nueva capa de protección a la Amazonia y ayudar a detener su (aparentemente) imparable proceso de destrucción. Para ello, charlamos con Augusto da Silva, más conocido como Tijolo, indígena y doctor en Sociedad y Cultura en la Amazonia por la Universidade Federal do Amazonas (UFAM, Brasil), que será el encargado de revelarnos los secretos más oscuros y misteriosos del lugar más puro y salvaje de la Tierra.
Antes de nada, queremos dar las gracias a Cristiana Barreto, arqueóloga y colaboradora del Museu Goeldi y de la Universidade de São Paulo y a Clarissa Beretz, asesora de prensa de “Amazônia Revelada”, sin cuya colaboración y entusiasmo esta emisión de BMQS habría sido imposible.
Revelando la Amazonia
Nuestra primera pregunta no podía ser otra ¿Qué es el proyecto “Amazônia Revelada”? ¿Cómo surgió esta iniciativa? Augusto da Silva nos dice que todo es obra de Eduardo Neves, director del Museo de Arqueología de la Universidade de São Paulo (USP, Brasil), que trabaja desde hace más de 30 años en esta región.
Inicialmente, Eduardo emprendió el proyecto “Amazônia Central”, entre los ríos Negro y Solimões. Gracias a él, empezó a tener cierta presencia en los medios científicos, lo que le permitió dar el salto al proyecto “Amazônia Revelada”, que es una forma diferente de investigar, en la que no solo participan profesionales de la academia, sino también las poblaciones tradicionales, que son las responsables de haber construido un entorno sostenible y con futuro.
La idea es alcanzar al público en general, a través de las redes sociales por ejemplo, para difundir la idea de que
los sitios arqueológicos son una realidad, una especie de huella digital de esos pueblos que vivieron en esa gran región y que, al llevar a cabo sus actividades cotidianas, dejaron esas historias en todos los rincones de la Amazonia (…) [difundir] cómo nuestros ancestros dejaron esas marcas en el entorno físico.
Tijolo nos cuenta que el proyecto empezó en 2022 y se prolongó hasta 2024, y en ese breve periodo de tiempo encontró evidencias arqueológicas de antiguas ocupaciones de la Amazonia. Los vestigios de esas ocupaciones revelan una historia bastante extensa, así como la forma en la que estos pueblos utilizaban el medio ambiente, o sea, la tierra, la selva y el agua y transformaban esos elementos de la naturaleza para atender las demandas sociales.
En las excavaciones arqueológicas se han encontrado, entre otros restos, cementerios de urnas funerarias, vasos cerámicos en los que se depositaban los restos humanos previamente cremados, antes de enterrarlos siguiendo unos ritos muy concretos.
Otro descubrimiento arqueológico que destaca nuestro entrevistado es el de Marajó várzea, una ecorregión amazónica inundada estacionalmente por mareas. Cubre una región de islas sedimentarias y llanuras aluviales en la desembocadura del Amazonas que se inunda dos veces al día cuando las mareas oceánicas empujan las aguas del río hacia la tierra. Pues bien, en esa zona los pueblos tradicionales construyeron lo que se conoce como “tesos”, una especie de cerros artificiales levantados en un espacio de tiempo muy breve que demuestra su gran conocimiento ambiental y de control de las mareas.
En el breve periodo de dos años en el que funcionó el proyecto, se llevaron a cabo otros trabajos destacados, como el mapeado del sitio arqueológico del petroglifo en el estado de Acre, objeto de una tesis doctoral dirigida por el profesor Eduardo Neves. En esta investigación se revela la existencia de una vasta red de caminos, de unos 530 km a través de la selva, que conducen a ese preciso lugar, así como de una asombrosa biodiversidad de palmeras de todo tipo, cultivas de ex profeso tanto para alimentar al ser humano como dar de comer a los animales y que convierten a la zona en autentico jardín del Edén.
Para finalizar la entrevista, Augusto da Silva nos dice que los “ribeirinhos”, o sea, los grupos humanos que habitan a las orillas de los múltiples ríos de la cuenca amazónica, son importantísimos porque actúan como repositorios vivos de tradiciones y culturas ancestrales. Los trabajos arqueológicos están demostrando que esta especie de biblioteca humana debe ser estudiada y vigilada, tanto de cerca como de lejos. Y en esta vigilancia de lejos es donde destaca el proyecto “Amazônia Revelada” que ha demostrado, sobrevolando las zonas boscosas y recurriendo a la tecnología LiDAR para reconocer sitios arqueológicos ocultos por la selva, que esos lugares pueden verse, y lo que es más importante, estudiarse, de manera respetuosa.
Para terminar os dejamos una última reflexión de Augusto da Silva, que resume perfectamente la filosofía del proyecto:
Es imposible volver al pasado, pero el pasado puede entreverse a partir de los vestigios dejados por las acciones humanas en la Amazonia antigua.
Para saber más
Página oficial del proyecto “Amazonia Revelada“.
Serie Amazônia, arqueologia da floresta, de la SESC TV, disponible (en portugués) en este enlace.
Bedinelli, T. (26 oct. 2023). A amazônia descoloniza seu passado. Sumauma. Recuperado de https://sumauma.com/a-amazonia-descoloniza-seu-passado/.
Baleia comunicação (18 mar. 2025). Ontologias amazônicas: 8 mil anos de história das sociedades contra o Estado. Entrevista especial com Eduardo Góes Neves. IHN. UNISINOS. Disponible aquí.
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