Esta emisión de #BMQS está dedicada a Guilherme Infante, creador de las tiras cómicas protagonizadas por “Capirotinho”, un diablillo rojo, de ojos blancos y vacíos… y sin pelos en la lengua. Guilherme empezó a dibujar como terapia, pero el éxito en redes sociales le permitió lanzar su primer libro en la Bienal de Río de 2017. Desde entonces, ha publicado más de media docena de obras con cómics, poemas e ilustraciones capaces de sacar una sonrisa hasta al más serio de la sala. Si no me creéis ahí va una pequeña muestra.



Las cosas a veces sí pasan por casualidad

Guilherme Infante nació en una pequeñísima ciudad del interior del estado de Minas Gerais llamada Campos Gerais, y es un ávido lector de cómics desde pequeño. Nunca pensó que acabaría convirtiéndose en artista. De hecho, empezó a dibujar a sugerencia de su psicóloga, quien le recomendó buscar un hobby para superar su ansiedad. Sus primeras tiras cómicas, inspiradas en aquellos temas que le preocupaban o le incordiaban, aparecieron en redes sociales. El éxito le pilló por sorpresa: al principio solo le seguían sus amigos, luego los amigos de sus amigos, y al final gente que no conocía, pero que compartía sus dibujos… Fue entonces cuando pensó que, quizá, otras personas se identificaban con sus preocupaciones y problemas.
Guilherme Infante nos cuenta que su primer libro apareció en 2017, cuando ya llevaba algunos años trabajando con tiras cómicas. Su título: Capirotinho – uma dose de porquês antes do fim (Lendari), dejaba muy claras sus intenciones, mayormente gamberras. Es más: la portada del libro no tiene desperdicio y en ella se ve a Capirotinho tranquilamente sentado en una colina mientras por la esquina superior izquierda asoman tres grandes meteoritos a punto de impactar con la Tierra. A este le siguieron Capirotinho. Manual para dias cinzentos (Pulp), As Antologias poéticas de Outono, su primera incursión en la poesía, Bichinhos fofoda-se, Capirotinho e suas angústias de ninar, Capirotinho o pior do pior, Capirotinho cinco anos y una revista llamada Crônicas de alta performance. La pandemia dejó su huella creativa en Guilherme (como en todos nosotros) y el resultado fue el libro Capirotinho quarentenado que apareció a finales de 2021.
Pero aún hay más: Guilherme es un autor especialmente prolífico y tras la cuarentena vio la luz Capirotinho manifesto proletario de 2022 y Capirotinho e seu Getúlio. Diálogos, con ensayos sobre temas tan subjetivos como la rabia, la existencia, nuestros propósitos en la vida o el amor. Algunos de estos libros ya están descatalogados, pero podéis conseguir algunos de ellos en la página web de Guilherme, aquí mismo.



En cuanto a sus referentes, aquellos artistas que le sirven de inspiración, Guilherme destaca especialmente a Laerte Coutinho, más conocida como Laerte, una artista gráfica que ha publicado en revistas tan importantes como Balão, O pasquim y Chiclete com Banana, además de dibujar regularmente para a Folha de S. Paulo y ser la responsable de ilustrar los últimos 30 años de la historia brasileña.
Como se gesta un alter ego
Las tiras cómicas de Capirotinho destilan un humor irónico y sincero que no pretende – ni de lejos- ser “políticamente correcto”, por eso le preguntamos a Guilherme Infante cuánto de sí mismo hay en ese personaje rojo y cornudo, cargado de mala baba. Nuestro entrevistado confiesa que cuando empezó a dibujar, allá por 2014, había mucho de él en Capirotinho. Con el tiempo, se dio cuenta de que si solo hacía referencia a su propio mundo interior, acabaría muy limitado y que debía dotar a Capirotinho de personalidad propia. Así, a veces, Capirotinho manifiesta opiniones y actitudes que no se ajustan al sentir del propio Guilherme, o incluso, con las que no está de acuerdo en absoluto. Esto exige mucho tacto y reflexión, porque resulta difícil definir los límites y separar a creador y criatura.
Guilherme nos confiesa también que no le gusta pensar a largo plazo. Hay algunos proyectos a los que querría dedicarse en el futuro como otro libro de poesía o un nuevo volumen de diálogos con temas que le causan desazón… pero nada definido. Y es que todo depende de cómo se porten las Musas, de si llega (y en qué forma lo hace) la inspiración. Es lo que tiene el arte. Por ahora, está trabajando en un nuevo libro, aún sin título, al que no quiere dar el carácter pesado y pesimista del anterior. Será una antología con sus tiras cómicas de los últimos dos años, a las que va añadir algunos trabajos inéditos, y que verá la luz en octubre o noviembre de 2023.
Artistas gráficos brasileños: un mundo por descubrir

Con tanto talento flotando en el aire, le preguntamos a Guilherme por la proyección internacional de los cómics y, sobre todo, de los artistas brasileños. Él nos cuenta que los autores brasileños son prácticamente desconocidos fuera de su país. Algunos pueden llegar a tener cierto renombre, sobre todo si trabajan para grandes firmas como la Marvel, pero no hay un cómic brasileño internacionalmente reconocido (o reconocible) como puede ser Tintín o Astérix. Está, por supuesto, A turma da Mônica, de Maurício de Sousa, que ha sido traducida a varios idiomas (incluyendo el español), pero que no llega al nivel de las obras de Hergé o de Uderzo y Goscinny.
Pero eso no significa que en Brasil no haya autores capaces de hacerles sombra. Guilherme destaca, por ejemplo, a Paula Villar, Nando Motta, por supuesto a Laerte, su principal fuente de inspiración, o Carlos Ruas, responsable de “Um sábado qualquer”, un referente para todos los que empezaron publicando sus creaciones en internet.
Solo nos queda dar las gracias a Guilherme Infante por su amabilidad en atendernos. Desde Radio Universidasd le deseamos todo el éxito del mundo y esperamos poder contar en breve con su presencia y su talento por este lado del Atlántico.
Bonus track: algunas tiras cómicas para pasar la tarde





